Seguro que esta receta, del bizcocho tradicional de yogur la conocéis todos, es el que comíamos de pequeños en casa de la abuela, de la tía, de la bisabuela y de las mamás, ya que pasaba de "mano en mano" generación tras generación.
Este clásico bizcocho es muy fácil de preparar, como ya sabréis, en el se utiliza el envase del yogur para medir los ingredientes, y como no lleva complicaciones al elaborarlo, es ideal para los que comienzan en la cocina, además es una receta muy fácil de recordar, por eso también lo llaman bizcocho 1, 2, 3, que son las cantidades en las que se llena el vasito de yogur para cada ingrediente.
Así que si comienzas en la cocina, o todavía no lo has probado, que lo dudo, ya estás tardando en prepararlo y sorprender a los tuyos con un rico desayuno o merienda.
Ingredientes:
3 huevos.
1 yogur de limón o natural.
1 medida del vaso del yogur de aceite de girasol.
2 medidas del vaso del yogur de azúcar.
3 medidas del vaso del yogur de harina.
Ralladura de limón.
1 sobre de levadura química.
Elaboración:
Precalentamos el horno a 180ºC.
Batimos los huevos con el azúcar hasta que blanqueen.
Añadimos el yogur y el aceite y volvemos a batir.
Incorporamos la ralladura.
Agregamos la harina y la levadura previamente tamizadas y mezclamos sin batir en exceso, lo justo para integrarlo.
Vertemos la mezcla sobre un molde previamente engrasado con aceite o mantequilla.
Horneamos unos 35-40 minutos a 180ºC.
Notas:
Precalienta el horno previamente.
Procura que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente.
Es muy importante tamizar los ingredientes secos para que el bizcocho salga esponjoso y tierno.
Puedes hacer este bizcocho con otros sabores de yogur, o añadiendo coco rallado, ralladura de naranja, gotas de chocolate...
